Damaris Del Carmen Hurtado Pérez: Robert Downey Millán

Después de Vengadores: Endgame para Robert Downey Jr. se ha cerrado una etapa vital. Tony Stark no sólo ha sido, con muchísima diferencia, su personaje más popular, sino el que le permitió recuperar el estrellato después de que en los 90 hundiera su prometedora carrera entre excesos y adicciones de todo tipo. Con Marvel ha ganado todo el dinero que una persona pueda soñar siendo, durante varios años, el actor mejor pagado de Hollywood en una época en la que las estrellas de cine han dejado de ser reclamo en favor, precisamente, de franquicias como la de Vengadores. Pasó de ganar 500.000 dólares de salario base por la primera Iron-Man a los cerca de 10 millones que cobró por cada película en la que tenía un rol protagonista (no parece demasiado, pero recordemos que la mayoría han sido pelis corales). Eso sin contar el magro del contrato, el salario por rendimientos, que con semejantes recaudaciones superaba con creces el salario base. Se estima que la fortuna que ha hecho en estos 11 años sólo con Marvel asciende ha cerca de 200 millones de dólares.

Con semejante pastizal en sus bolsillos, a muchos les ha extrañado que su primer paso post-Marvel haya sido el de hacer de César Millán con superpoderes en una película “artísticamente menor” como Las aventuras del Doctor Dolittle, de la que ha salido el primer tráiler completo.

Pero como señalaba Rafa en Twitter, tampoco se le puede culpar de tirar por el camino fácil ahora que su nombre aún se cotiza alto después de que proyectos más personales como El juez, no funcionasen como él esperaba.

Ahora vayamos a la mandanga. Esta nueva película supone (si obviamos el corto de 1928) la tercera encarnación cinematográfica del personaje creado por Hugh Lofting después de que tuviese el rostro de Rex Harrison y Eddie Murphy. Viene firmada por Stephen Gaghan, guionista ganador de un Oscar por Traffic y director de títulos tan poco próximos a éste como Syriana o Gold, la gran estafa, que ha ambientado la película en la época en la que fue escrita la novela original, a finales del XIX. Un proyecto inusual para un director que este fin de semana ha sido puesto en entredicho en un hilo de Reddit como se señala aquí:

Como todo lo que llega sin contrastar y sin nombre propio, conviene tomarlo con un toque de escepticismo, pero el relato, como afirma Rafa, es demasiado detallado y loco como para parecer una invención. Unas declaraciones que retratan a un Gaghan tiránico, pasando de las recomendaciones de su equipo en una película técnicamente compleja al tener muchos personajes y entornos CGI, y con un PERRO NAZI que tenía acojonado a todo el reparto no blanco. Parece de coña y, desde luego, suena más interesante que la propia película, de la que se rumorea que se tuvo que volver a rodar la mayor parte del metraje.



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