Damaris Del Carmen Hurtado Pérez: ‘Doom’ de oferta*

Como dijo Virginia Woolf en su clásico inmortal Al Faro (1927), “Nunca juzgues un libro por la portada pero si la portada hace saltar en pedazos un contador Geiger es legítimo echar patas”. Aquí os dejamos treinta segundos de Doom: Annihilation, nueva entrega directa a vídeo de la adaptación cinematográfica basada en el clásico de acción en primera persona de ID Software.

Es una producción de Universal 1440 Entertainment, el brazo de publicación doméstico de Universal, es decir, que esto va directo a VOD y Walmart. Está escrita y dirigida por Tony Giglio (Chaos, Timber Falls), con la producción de Lorenzo Di Bonaventura (Bumblebee), protagonizada por Amy Manson (Atlantis), Dominic Mafham (Ophelia), Luke Allen-Gale (Dominion), and Nina Bergman (The Car: Road to Revenge).

Rodada en Bulgaria, no es exactamente una secuela sino una nueva aventura de terror en el universo diseñado por John Romero, que mantiene las mismas líneas básicas: experimento en Marte sale mal, se abre un portal al Infierno y un grupo de Marines se enfrentan sin quererlo a una horda de demonios.

Ahí arriba está el avance, que pone de manifiesto que han rodado la película con lo puesto en una decisión que, ya por meter mi opinión sumariamente descartable, me parece un poco chuflas teniendo en cuenta en qué momento está ahora la serie de juegos del Doom. Ésto, en 2006, cuando parecía que la cosa había empezado a decaer (y conste que el Doom 3 me parece una gozada, simplemente era el comienzo de un largo paréntesis), pues bueno, se puede entender. Lo haces y los fans acérrimos se lo comen. Pero en 2019, con la franquicia de nuevo en órbita merced a la absoluta barbaridad de entrega creada por Marty Stratton y compañía — una sinfonía de balas, rayos, leches y METAL que prácticamente te funde el ratón a la mano –, me parece que hace flaco favor al producto. Aunque sea buena.

Fin de la rajada.

Fotos, cortesía de Dread Central.

PD: Realmente está de oferta. Nueve pavos, creo. Hacéos un favor. Mirad… mirad esta mierda.

 

 

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