Damaris Del Carmen Hurtado Pérez: Venecia 2018. Primera jornada: “First Man. (El primer hombre)” de Damien Chazelle deja a medio gas

Hoy ha arrancado la 75ª edición de la Mostra de Venecia y se nos avecinan unos meses intensos y espero que disfrutables, como redactora que se dedica medio año a hablar de la carrera al Oscar lo único que le pido a la presente es que además de buenas propuestas sea divertida hasta el final. Venecia coincide con el festival de Telluride que se desarrollará este fin de semana y con parte de Toronto que se iniciará el 6 de septiembre pero al certamen que dirige Alberto Barbera ya no le preocupa tanto por el hecho de que la la mitad de los acreditados se larguen a Toronto a mitad de la Biennale porque ya ha conseguido la primicia de los títulos que se exhiben a concurso en El Lido.

Una de esas películas que se aseguró Venecia en la pasada edición fue La forma del agua de Guillermo del Toro que se convirtió en la primera película de género fantástico que se alzó con el León de Oro y que finalmente se impuso como la ganadora en la 90º edición de los Oscars. El director mexicano ha aceptado el encargo de presidir el jurado de la sección oficial con la promesa de que será flexible con las opiniones de sus compañeros básicamente para que no se le acuse de barrer para casa y premiar a su cuate Alfonso Cuarón que va a concurso con Roma. Le acompañan Sylvia Chang, Trine Dyrholm, Nicole Garcia, Paolo Genovese, Malgorzata Szumowska, Taika Waititi, Christoph Waltz y Naomi Watts.

Damien Chazelle vuelve a Venecia dos años después de inaugurar y optar al León de Oro por La La Land con la que posteriormente se llevó el Oscar al mejor director, el film finalmente no ganó el Oscar a la mejor película pero nadie puede negar que fuera el acontecimiento cinematográfico de esa cosecha. El primer hombre se centra en la figura del astronauta Neil Armstrong, el primero en pisar La Luna. La película protagonizada por Ryan Gosling sigue al astronauta desde el año 1961 hasta la misión espacial del Apolo XI que le permitió llegar al satélite del planeta Tierra y es una combinación de un retrato íntimo con la emoción y la épica de su hazaña. La cinta ha sido acogida con un aplauso frío al finalizar su primera proyección y hay una clara diferencia entre la crítica anglosajona que la defiende a toda costa por su virtuosismo, por saber plasmar esa pasión de Armstrong que termina convirtiéndose en una obsesión, algo a lo que Chazelle nos tiene acostumbrados, y también por las entregadas interpretaciones de Ryan Gosling y Claire Foy, sin embargo la prensa internacional, especialmente la española, no es tan benévola con esta propuesta achacándole su falta de ritmo y que Chazelle está más entregado a su lucimiento tras la cámara que a construir una buena historia. Cuando se ha alcanzado la cima con tan solo dos películas y se es el más joven en ganar el Oscar a la mejor dirección es hasta cierto punto lógico que cierto sector de la prensa le espere de uñas, y también lo opuesto que se proteja al nuevo niño bonito de Hollywood. Veremos cómo le va durante los próximos días en terreno norteamericano y cuando se estrene el próximo mes de octubre.

Mañana se presentarán The Mountain de Rick Alverson y Roma de Alfonso Cuarón.

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