Damaris Del Carmen Hurtado Pérez: Menú fílmico para una cuarentena: Juan Roures
Menú fílmico para una cuarentena
Volumen IV prescrito por Juan Roures
La cuarentena es una oportunidad perfecta de recuperar películas para las que, por duración, formato o estilo, no hemos tenido tiempo antes. Pero para eso hace falta un ánimo férreo y eso es precisamente lo que falta a muchos ahora mismo. Por consiguiente, como complemento a la relativa exigencia de los demás menús, hemos optado en esta ocasión por quedarnos con veinte títulos que, por así decirlo, se ven solos, todos ellos tan reivindicables como fáciles de infravalorar. Presentados a continuación en orden alfabético, y protagonizados por personajes de todo tipo de edades, géneros, razas, procedencias, especies y orientaciones sexuales que nunca se rinden ante los problemas del mundo, estos largometrajes están disponibles en distintas plataformas de VOD y comparten una característica tan sencilla como a menudo menospreciada: la capacidad de hacer sentir bien a los espectadores.
▼ Hoje eu quero voltar sozinho, Daniel Ribeiro; Visages Villages, Agnès Varda y JR.
Mean Girls, Mark Waters; Meet Me in St. Louis, Vincente Minnelli.
Mean Girls, Mark Waters; Meet Me in St. Louis, Vincente Minnelli.
A primera vista (Hoje eu quero voltar sozinho, Daniel Ribeiro, 2014). La pueden ver en Filmin.
Tras triunfar con un tierno cortometraje sobre un triángulo amoroso entre un adolescente ciego, su mejor amiga y un nuevo y encantador alumno, Daniel Ribeiro llevó la historia a la gran pantalla con suma dignidad, dando visibilidad a las dificultades que acarrean tanto la discapacidad como la homosexualidad, o sea, todo elemento que nos haga salirnos de la supuesta norma. El resultado no es perfecto, no, pero sí lo es para paliar los efectos negativos de la cuarentena.
Caras y lugares (Visages Villages, Agnès Varda y JR, 2017). La pueden ver en Filmin.
A sus 89 años, dos años antes de su fallecimiento, Agnès Varda, todo un icono de la Nouvelle Vague, seguía en perfecta forma. Así lo demuestra este documental, donde ella y el artista gráfico urbano y fotógrafo JR realizan un conmovedor viaje durante el que retratan las caras y los lugares del maravilloso mundo que habitamos. Esta joyita es apacible, creativa y, sobre todo, esperanzadora. Ideal para los tiempos que corren.
Chicas malas (Mean Girls, Mark Waters, 2004). La pueden ver en HBO.
Algunos se sorprenderán al encontrar Chicas malas en esta publicación. Pero no deberían: bajo su apariencia tontorrona, se encuentra la que posiblemente sea la mejor comedia adolescente jamás creada, todo gracias al magnífico guion de Tina Fey, plagado de citas dignas de ser enmarcadas, desde «¡Superfabu!» hasta «Los exnovios están prohibidos para las amigas, es como la gran regla del feminismo», pasando, claro está, por «Los miércoles vamos de rosa». Lindsay Lohan, Rachel McAdams, Amy Poehler y Amanda Seyfried nunca han estado mejor.
Cita en San Luis (Meet Me in St. Louis, Vincente Minnelli, 1944). La pueden ver en Filmin.
Nada como un musical de la época dorada de Hollywood para sentirse acompañado, y, de todas las opciones a nuestro alcance, Cita en San Luis, del gran Vincente Minnelli, destaca por su candor y su ternura, ensalzando la magia del hogar sin amago alguno de cursilería (para la época, claro). Ver a Judy Garland protagonizar números musicales como “The Trolley Song” o “Have Yourself a Merry Little Christmas” es viajar al pasado sin ganas de billete de vuelta.
▼ How to Steal a Million, William Wyler; 我的父親母親, Zhang Yimou.
The Hate U Give, George Tillman Jr.; The Emperor's New Groove, Mark Dindal.
The Hate U Give, George Tillman Jr.; The Emperor's New Groove, Mark Dindal.
Cómo robar un millón y... (How to Steal a Million, William Wyler, 1966).
La pueden ver en Filmin.
Nadie se gana la empatía del espectador con la facilidad de Audrey Hepburn, quien, quizá por su carisma estelar, belleza élfica y sutileza cómica, siempre ha estado infravalorada como actriz. Por tanto, Ariane (1957), Desayuno con diamantes (1961) Charada (1967) o Dos en la carretera (1967), todas ellas disponibles en VOD, serían recomendaciones igualmente válidas, pero nos hemos quedado con Cómo robar un millón y... por su locura y su luminosidad, impulsadas ambas también por el perfecto coprotagonista, Peter O'Toole, y la exquisita realización de William Wyler.
El camino a casa (我的父親母親 [Wo de fu qin mu qin], Zhang Yimou, 1999).
La pueden ver en Apple TV.
Hasta las películas cuestionables de Zhang Yimou merecen respeto, pero El camino a casa sobresale por su ternura y su honestidad. Esta historia de amor rural alterna pasado (en color) y presente (en blanco y negro) para generar un fuerte sentimiento de nostalgia, acrecentado por la suma belleza de la banda sonora y la fotografía. Así, por cierto, saltó a la fama Zhang Ziyi, que pronto se convirtió en la estrella asiática más famosa del mundo gracias a Tigre y dragón (2000), 2046 (2004) y Memorias de una geisha (2005).
El emperador y sus locuras (The Emperor's New Groove, Mark Dindal, 2000).
La pueden ver en Disney+.
Atrapada entre las obras maestras de los 90 y los desaciertos de la primera década del siglo XX, El emperador y sus locuras es un clásico Disney injustamente olvidado colmado de momentos desternillantes gracias, en gran medida, a la extraordinaria labor de doblaje, donde sobresale una inmensa Eartha Kitt. Además, como siempre, la animación es exquisita; la música, mágica y los valores desplegados, dignos de ser escuchados.
El odio que das (The Hate U Give, George Tillman Jr., 2018). La pueden ver en Movistar+.
Con el ingenioso bestseller de Angie Thomas de base, esta película invita a reflexionar sobre el aún latente racismo de la sociedad estadounidense. Amanda Stenberg encarna a una adolescente que se mueve con soltura entre dos mundos, el pobre y negro que llama hogar y el rico y blanco donde estudia, pero todo cambia cuando un terrible incidente le hace replantearse las reglas sociales. Una activista del Black Lives Matter pronuncia unas palabras demoledoras: «Nunca podemos ir desarmados porque es nuestro color lo que temen». Y, sí, las lágrimas son inevitables, pero, de alguna forma, son lágrimas sanadoras.
▼ Entre tinieblas, Pedro Almodóvar; Cactus Flower, Gene Saks.
Harold and Maude, Hal Ashby; Muriel's Wedding, P.J. Hogan.
Harold and Maude, Hal Ashby; Muriel's Wedding, P.J. Hogan.
Entre tinieblas (Pedro Almodóvar, 1983). La pueden ver en Netflix.
Cristina Sánchez Pascual, Julieta Serrano, Marisa Paredes, Carmen Maura, Lina Canalejas, Chus Lampreave, Mary Carrillo, Manuel Zarzo y Cecilia Roth conforman un reparto de ensueño en una de las películas menos conocidas de nuestro director más internacional (cuya fascinante filmografía está presente en VOD casi en su totalidad), una irreverente comedia negra ambientada en un convento de “Redentoras Humilladas” (sí, lo que oyen). Impagable, y sumamente desprejuiciada, crítica al extremismo religioso de la que no se habla lo suficiente.
Flor de cactus (Cactus Flower, Gene Saks, 1969). La pueden ver en Filmin.
Tras Descalzos por el parque (1967) y La extraña pareja (1968), Gene Saks reunió a un siempre perfecto Walter Matthau, una principiante Goldie Hawn tan adorable como divertida, un sexy Rick Lenz a menudo salido de la ducha y una sorprendentemente hilarante Ingrid Bergman en una comedia tan loca como emotiva sobre las expectativas románticas de los 60, las cuales, nos guste o no, siguen vigentes. Muy chic.
Harold y Maude (Harold and Maude, Hal Ashby, 1971). La pueden ver en Apple TV.
La mejor creación, de lejos, de Hal Ashby, es una peculiar comedia negra sobre la extraña relación entre un joven asocial (Bud Cort) y una anciana alocada (Ruth Cordon) a los que une la fascinación por la muerte. El resultado es simpático, cínico y absurdo, pero también sumamente melancólico gracias en gran medida a las inolvidables canciones de Cat Stevens. «Si quieres cantar, canta; si quieres ser libre, sé libre, porque hay mil cosas que puedes ser, sabes que las hay».
La boda de Muriel (Muriel's Wedding, P. J. Hogan, 1994). La pueden ver en Filmin.
Justo antes de dirigir a Julia Roberts en la brillante comedia romántica La boda de mi mejor amigo (1997), P. J. Hogan hizo lo propio con Toni Collette en la todavía más extraordinaria La boda de Muriel, dramedia australiana sobre una joven con sobrepeso que vive en un mundo de fantasía, canciones de ABBA y catálogos nupciales. Además de hilarante y conmovedora, esta cinta es un certero puñetazo a la sociedad hipócrita y machista que habitamos.
▼ La giovinezza, Paolo Sorrentino; The Adventures of Priscilla, Queen of the Desert, Stephan Elliott.
What We Do in the Shadows, Taika Waititi; Ma vie en rose, Alain Berliner.
What We Do in the Shadows, Taika Waititi; Ma vie en rose, Alain Berliner.
La juventud (La giovinezza, Paolo Sorrentino). La pueden ver en Amazon Prime.
La fugacidad de la existencia cobra un tono embelesadoramente mágico en las manos del director de La gran belleza (2013), que ofrece un espectáculo lleno de paz donde cada escena es una obra de arte. Michael Caine, Rachel Weisz, Harvey Keitel, Paul Dano y Jane Fonda encarnan a triunfadores en horas bajas que coinciden en un apacible hotel de los Alpes, sirviendo los contenidos pero reveladores diálogos para profundizar en sus corazones y, al tiempo, en los nuestros. Música para los oídos, literal y figuradamente.
Las aventuras de Priscilla, reina del desierto (The Adventures of Priscilla, Queen of the Desert, Stephan Elliott, 1994). La pueden ver en Filmin.
Pocas cosas hay más divertidas que ver al Terence Stamp de Lejos del mundanal ruido (1967), el Hugo Weaving de Mátrix (1999) y el Guy Pearce de Memento (2000) recorrer el desierto australiano como drag queens alocadas al ritmo de temas míticos de la lucha LGTB como “I Will Survive” o “Go West”. Lo mejor es que, lejos de caer en la caricatura fácil, los tres dotan a sus personajes de suma dignidad, ganándose la empatía del espectador desde el primer fotograma y ofreciendo uno de los viajes más memorables de la historia del celuloide.
Lo que hacemos en las sombras (What We Do in the Shadows, Taika Waititi y Jemaine Clement, 2014). La pueden ver en HBO.
Cinco años antes de ganar el Oscar con Jojo Rabbit (2019), Taika Waititi escribió, dirigió y protagonizó en compañía de Jemaine Clement una obra muy superior: Lo que hacemos en las sombras, un falso documental neozelandés que expone en clave de humor la vida cotidiana de los vampiros modernos. Tan ingeniosa como gamberra, esta parodia de terror se convirtió en una obra de culto al instante e inspiró la serie de televisión del mismo nombre.
Mi vida en rosa (Ma vie en rose, Alain Berliner, 1997). La pueden ver en Filmin.
Ludovic, el hijo menor de una familia de clase media, tiene una única ilusión: ser una niña. O, mejor dicho, ser percibida como tal, porque, en realidad, solo está deseando ser lo que ya es. Allá por 1997 surgió una valiente mirada a la identidad transgénero que, en clave de comedia cursi, invitaba a hacerse preguntas que la mayoría todavía rechazaba. Atención al chirriante uso del color para representar tanto la ensoñación infantil como la hipocresía adulta.
▼ 魔女の宅急便, Hayao Miyazaki; 海街diary, Hirokazu Koreeda.
Pride, Matthew Warchus; Un amour de jeunesse, Mia Hansen-Løve.
Pride, Matthew Warchus; Un amour de jeunesse, Mia Hansen-Løve.
Nicky, la aprendiz de bruja ([魔女の宅急便] Majo no takkyuubin, Hayao Miyazaki, 1989).
La pueden ver en Netflix.
Cualquier obra dirigida por Hayao Miyazaki y musicalizada por Joe Hisaishi, sin excepción, merece ser vista con atención por niños y mayores por igual, pero nos hemos quedado con Nicky, la aprendiz de bruja por ser la menos vista y valorada pese a no tener absolutamente nada que envidiar al resto. En ella asistimos al encantador entrenamiento de una brujita de 13 años, lo que no deja de representar el proceso que todos hemos atravesado (y, en general, seguimos atravesando) de camino a la supuesta maduración.
Nuestra hermana pequeña (海街diary [Umimachi Diary], Hirozaku Koreeda, 2016).
La pueden ver en Filmin.
El maestro japonés de lo cotidiano ofrece uno de sus platos más exquisitos con su emotiva adaptación del popular manga de Akimi Yoshida, la historia de cuatro hermanas reunidas tras el funeral de su padre. Como el creador de Still Walking (2008) y Un asunto de familia (2018) nos tiene acostumbrados, cada gesto es relevante a la hora de comprender a personajes que, tras una fachada de atolondrada felicidad, esconden fantasmas contra los que no siempre es fácil luchar. El resultado es acogedor, risueño y apacible, pero también lastimero.
Pride (Matthew Warchus, 2014). La pueden ver en Filmin.
Divertidísima, pero también muy emotiva, esta comedia británica cuenta la historia real de la unión entre mineros y una asociación LGTB frente al opresivo mandato de Margaret Thatcher, destapando prejuicios pero también la bondad latente en todo ser humano. Viejos y nuevos talentos —a destacar Imelda Staunton y Andrew Scott— conforman un reparto perfecto para afrontar el genial guion de Stephen Beresford con desparpajo y afecto. «¡¡¡Los gais y las lesbianas apoyan a los mineros!!!»
Un amour de jeunesse (Mia Hansen-Løve, 2011). La pueden ver en Filmin.
Entre El padre de mis hijos (2009) y Eden: Lost in music y (2014), Mia Hansen-Løve echó la vista atrás para reflexionar sobre una etapa que, de un modo u otro, marca a todo el mundo: el primer amor. Con suma elegancia pero, ante todo, mucho sentimiento, la realizadora gala analiza las consecuencias que el amor y el desamor tienen en nosotros sin necesidad alguna de azúcar, ofreciendo una sencilla y nada condescendiente educación sentimental. Advertencia: deja huella.
View Source
Comentarios
Publicar un comentario